François Bayrou presenta su respuesta a la "maldición" de la deuda

Fue exactamente a las 16h del martes 15 de julio cuando François Bayrou abrió su rueda de prensa para presentar los grandes retos de lo que llamó "nuestro momento de la verdad ". "Más de 3.300 billones de euros de deuda ", "más de 150.000 millones al año", "cada segundo, la deuda francesa aumenta 5.000 euros" ...
Con infografías en mano, el Primer Ministro usó palabras sencillas y contundentes para concienciar a los franceses de que «el sobreendeudamiento es una maldición sin salida». «Es el último paso antes del abismo», añadió, antes de anunciar un plan dual: «detener la deuda» y «reactivar la producción».
El jefe de gobierno comenzó describiendo el contexto y las limitaciones que pesan sobre las finanzas francesas, citando dos razones: «El Estado lo paga todo. Nos hemos vuelto adictos al gasto público» y «hemos perdido gradualmente de vista que, para distribuir, hay que producir». Su plan presupuestario prevé un ahorro de 43.800 millones de euros para reducir el déficit público al 4,6 % en 2026, al 4,1 % en 2027, al 3,8 % en 2028 y al 2,8 % en 2029.
En el proceso, François Bayrou declaró que el Estado daría ejemplo al establecerse como norma no gastar más en 2026 que en 2025. Con la excepción de las Fuerzas Armadas, «todos los ministerios se unirán en este esfuerzo colectivo». Con un folleto en mano, François Bayrou lanzó varios anuncios, incluyendo un esfuerzo significativo por parte de los funcionarios del Estado.
Se promulgó la norma de "no reemplazo" para uno de cada tres funcionarios jubilados, así como la creación de una empresa inmobiliaria para administrar los activos estatales. Simultáneamente, se eliminarán muchas agencias estatales consideradas "improductivas" . También se propuso la eliminación de dos días festivos ( el Lunes Santo y el 8 de mayo).
Al mismo tiempo, anunció que se lanzará un plan de 5.000 millones de euros para el gasto sanitario a partir de este otoño. Entre los temas tratados se encuentran una reforma profunda del tratamiento de las enfermedades de larga duración y la lucha contra la excesiva incidencia de las bajas laborales.
Como se anticipó durante varios días, el Primer Ministro continuó con sus anuncios declarando un " año en blanco " para 2026, lo que implica una congelación total del gasto al nivel del año anterior. A partir de entonces, no se incrementarán ni las prestaciones, ni las escalas salariales, ni siquiera los presupuestos ministeriales, aclaró el jefe del ejecutivo. François Bayrou, reconociendo que se trata de un "esfuerzo muy significativo", aseguró a su audiencia que dicha decisión ayudaría a contener el aumento del gasto en más de 7.100 millones de euros. El Primer Ministro también quiere revisar la deducción fiscal del 10% para el cálculo de las pensiones de jubilación.
Con estos anuncios, François Bayrou sabe que su supervivencia en Matignon está en juego. Amenazado con una censura parcial por parte de la izquierda, el primer ministro enfatizó que se requeriría un esfuerzo "especial " de quienes tienen la capacidad de contribuir más, sin entrar, sin embargo, en detalles.
La Croıx